CALACA CALAQUITA CALACONA.
La última luna de octubre y noviembre dice presente, también la bonita costumbre dónde la muerte aparece sonriente. De atuendo blanco y olanes ésta vez se disfrazó la muerte, y aunque le faltan los dientes molares me quiere hacer ver mi suerte. Calaca calaquita calacona a que no miras dónde me encuentro será por tu falda ampona o porque me estoy haciendo el muerto. Un dos tres por Rodrigo que está detrás de la puerta la calaca no puede conmigo seguro que no me encuentra. Un dos tres por Renata a quien la muerte agarró bailando y de paso también remata con Juan por andar vacilando. De copal y cempasúchil quiero perfumen mi altar cuando por fin me alcance la muerte y me lleve a morar a Mictlán. Ya me voy ya me despido con mi cara muy sonriente yo no le temo al destino la flaca me pela lo dientes.
José Reséndiz | 29 Años | Querétaro, México.